La muerte tiene el don de estar siempre presente, y ser una desconocida, de estar siempre tan cerca, y nosotros verla tan lejos. La muerte junto con el sexo es una gran arma para dominar el pensamiento de las personas.
Si algo tiene la muerte, es que es lo único seguro que nos va a pasar, y que por mucho que creamos en una fuerza sobrenatural o en un Dios, al final lo seguro es que no tenemos ni idea de que pasa cuando te mueres.
Muchas veces he oido a alguien que después de una operación habla de haber estado en el umbral de la muerte, y la mayoría de las veces estas personas dicen, que si eso es la muerte, no debe estar tan mal. Sin ningun tipo de rigor cientifico creo firmemente en que la muerte sólo la experimentas cuando te mueres, y una vez esto pasa, nunca vas a volver a explicarselo a nadie.
Hace poco una amiga, me hablaba de apariciones de muertos... la verdad y con el máximo respeto que esta perosona me merece, yo no puedo creer en alguien muerto que vuelve a este mundo porque se dejó algo pendiente.
De cualquier manera, mi amiga decía que a ella le daban miedo estas apariciones, porque era algo que no debía ocurrir, y que si ocurría era bastante siniestro. Después de analizarlo, y sin haber tenido yo ninguna experiencia parecida, creo que si sobrevives al susto de que se te aparezca un muerto, podrías vivir más feliz el resto de tu vida, ya que en ese momento sabrás de forma cierta, que realmente hay algo después de la muerte. A parte de que analizandolo friamente, que es lo peor que te puede hacer un aparecido, ¿matarte? bueno eso no es un problema si vas a poder seguir existiendo de otra forma en otro lugar.
Insisto que digo esto con todo el respeto a la forma de pensar de cada uno, pero yo no creo que eso sea posible.
Desde luego yo no quiero morir, primero por miedo a lo desconocido, segundo porque lo que conozco aqui me gusta la suficiente como para conformarme.
Creo que lo peor de la muerte, es cuando otros a quienes quieres, mueren, cuando te pasa a ti, la sensación que me imagino es de miedo/incertidumbre cuando les pasa a otros la sensación es de desesperación y a veces, de falta de motivación para seguir.
Santa Teresa de Ávila (1515-1582) Vivo sin vivir en mí
Vivo sin vivir en mí,
y de tal manera espero,*
que muero porque no muero.
Vivo ya fuera de mí
después que muero de amor;
porque vivo en el Señor,
que me quiso para sí;
cuando el corazón le di
puse en él este letrero:
que muero porque no muero.
Esta divina prisión
del amor con que yo vivo
ha hecho a Dios mi cautivo,
y libre mi corazón;
y causa en mí tal pasión
ver a Dios mi prisionero,
que muero porque no muero.
¡Ay, qué larga es esta vida!
¡Qué duros estos destierros,
esta cárcel, estos hierros
en que el alma está metida!
Sólo esperar la salida
me causa dolor tan fiero,
que muero porque no muero.
¡Ay, qué vida tan amarga
do no se goza el Señor!
Porque si es dulce el amor,
no lo es la esperanza larga.
Quíteme Dios esta carga,
más pesada que el acero,
que muero porque no muero.
Sólo con la confianza
vivo de que he de morir,
porque muriendo, el vivir
me asegura mi esperanza.
Muerte do el vivir se alcanza,
no te tardes, que te espero,
que muero porque no muero.
Mira que el amor es fuerte,
vida, no me seas molesta;
mira que sólo te resta,
para ganarte, perderte.
Venga ya la dulce muerte,
el morir venga ligero,
que muero porque no muero.
Aquella vida de arriba
es la vida verdadera;
hasta que esta vida muera,
no se goza estando viva.
Muerte, no me seas esquiva;
viva muriendo primero,
que muero porque no muero.
Vida, ¿qué puedo yo darle
a mi Dios, que vive en mí,
si no es el perderte a ti
para mejor a Él gozarle?
Quiero muriendo alcanzarle,
pues tanto a mi Amado quiero,
que muero porque no muero.
Palabra: DESCONOCIDO
muerte
